De corazón de chamaco Y de estampa primorosa Más que mi cuaco de estima Era para mí otra cosa Mi amigo, mi confidente En los triunfos y derrotas
Allá en Jojutla Morelos Me encontré al jefe Zapata Se enamoró de mi cuaco Al mirar su fina estampa Y yo le dije: Mi jefe Tómelo para la causa
Para la patria, mi vida Por eso di mi caballo Él se paraba derecho Al sentirse en otras manos Me hablaba con relinchidos Cuando yo me fui llorando
¡Música, música, música!
Yo le serví de pilmama Porque se quedó sin madre Murió la yegua en el parto Y en mis brazos pudo criarse Yo lo quise como a un hijo Y él a mí como a su padre
Por eso me duele el alma Cuando se lo di a Zapata Yo no tuve hijos de sangre Para darlos a la patria Por eso di mi caballo Y con él también el alma
Después de servir bonito En los campos de batalla Lo mataron en combate En las cercanías de Cuautla Y así terminó el potrillo Que le regalé a Zapata