Ay, mi tierra amada
Soy tu prisionero robo tus riquezas
Cavo en tus entrañas y rompo y depredo
Metales y piedras del sol escondidos
Con sudor se hacen, con trabajo saco
Con cansancio sigo
Carbón, flor y estaño, plata, oro, zafiros
Ay, que no los quiero, ay, que no los quito
Son gotas de sangre de hermanos dormidos
Tus esclavos somos apenas nacidos
Damos lo que es nuestro
Somos extranjeros, vamos peregrinos
Ay, mi tierra amada, soy tu prisionero
Prisionero de otros, ay, que no los quiero
Dame la esperanza de un camino nuevo
Fuerza, fuerza, fuerza, fuerza
Fuerza, fuerza, fuerza, fuerza
Fuerza, fuerza, fuerza, fuerza
Fuerza, fuerza, que la tierra cede
Fuerza, fuerza, que la tierra otorga
Agua, agua, la semilla llega
Agua, agua, la espiga brota
Fuego, fuego, sol no me calcines
Fuego, fuego, quema las escorias
Aire, aire, esparce las nubes
Aire, aire, renueva las hojas
Todo lo que siembro, todo lo que brota
Otro se lo lleva, el viento lo cobra
Me quedan las manos, mi esperanza sola
Fuerza, fuerza, vámonos, hermanos
Fuerza, fuerza, marchemos, marchemos
Fuerza, fuerza, ya se ven las luces
Fuerza, fuerza, de un mundo nuevo
Fuerza, fuerza