Zarpo en navíos fantasmas, contemplando
Un calendario donde no habita el mañana
Palabras sin dueño envejecen a mi lado
Asumiendo que hay caminos que recorremos
Buscando únicamente tropezar
En largas jornadas de aburrimiento y
Coprolalia hurgo tras puertas de arena
Intentando averiguar quien habita dentro
De mí desde el día en que incluso
Las palabras más dulces ardieron
Magnifico aquella vez en que le dije
Ojalá me corresponda de ahora en más
Derramar luz solar sobre tus días
Hoy que ejerzo el oficio de ser sombra
¿Dónde pongo a secar mis cenizas?
Con la inefable tristeza de una caja de música
Aprendí que estar los dos en el mismo lugar y al
Mismo tiempo no siempre equivale a estar juntos
Cuando los minutos en vez de pasar, se desgranan
El ocaso llega con alucinante puntualidad
Ambos amábamos la soledad. Ella, entre el gentío
Yo en mis pensamientos viajando a contramano
Solía subrayabar los instantes de felicidad
Como un estudiante aplicado. Juntos fuimos
Poesía, por separado, solo somos palabras
Tirábamos el alma por la ventana en cada otoño
Ensayando una coreografía de posturas erróneas
Rodaba la vía láctea por sus mejillas, con la
Maligna ternura de un ritual de besos inoportunos
Somos apenas un pasado que reniega de sí mismo
Quiero abandonar el vicio de masticar tinieblas
En esta madrugada de lluvias prematuras, pero solo
Puedo tomarme una foto de pie junto a su ausencia
Asumo los primeros embates de la nostalgia
De un llanto que no supo llorar a tiempo
Se escucha el impacto del peso de nuestras
Mentiras que siguen cayendo al piso
Pacientemente las junto, hechas añicos
Pues son los pocos recuerdos que conservo
De los inescrutables designios de su proceder
Por fin puedo identificarla, ladrillo
En el mural de mi pesadumbre
Cae la noche con su inevitable
Séquito de sombras y el tiempo
Marchita la flor de los instantes
Leo los mismos libros con ojos más viejos
Mientras añoro el corazón que la añoraba
Tiempos aquellos de gastar minutos en ser
Felices, con el alma escapando de la maleta
Anochece más temprano sobre mis sentimientos
No logro ser neutro, cauteloso, equitativo
Siempre espero hasta llegar al precipicio
Para buscar escaleras de emergencia
Tenía penas incultas hasta que aprendieron
A doler, abyección de ignorar ciertos errores
Esta forma de vivir que muere dentro de
Mis huesos bien sabe que no siempre
Fui digno de los instantes a su lado
Hablábamos de los dos como quien
Observa a la distancia una tragicomedia
Con un invierno que se me congela en las
Manos, un mal sabor de boca cosiéndome los
Labios, y eternidades esculpidas sobre nubes
¿Qué nombre le pongo a ese intervalo
Infinito entre su diciembre y mi enero?