La locura Nunca tuvo maestro Para los que vamos a bogar Sin rumbo perpetuo
En cualquier otra dirección Con tal de no domar los caballos de la exaltación La rutina hace sombra a las pupilas Que se cierran a los disfrutes que nos quedan
Avalancha Avalancha Avalancha Avalancha
Necesitamos El valioso tiempo Que abandonas sin saber Qué cojones hacer con él
Nosotros somos la comida Y alguien está efectivamente hambriento Y no hay retorno a la conciencia Tras el desvarío del amor tempestuoso
Avalancha Avalancha Avalancha Avalancha
Aún nos quedan cosas por hacer Si no das un paso, te estancas Aún nos quedan cosas por decir Y no hablas
La locura Nunca tuvo maestro Para los que vamos a bogar Sin rumbo perpetuo
La muerte será un adorno Que pondré al regalo de mi vida La Luna ejerce extraños influjos Que se contradicen, y no hay quien descifre