Quisiera abrir lentamente mis venas
Mi sangre toda vertirla a tus pies
Para poderte demostrar
Que más no puedo amar
Y entonces morir después
Y sin embargo tus ojos azules
¡Azul que tienen el cielo y el mar!
Viven cerrados para mí
Sin ver que estoy así
¡Perdido en mi soledad!
¡Sombras, nada más
Acariciando mis manos!
¡Sombras, nada más
En el temblor de mi voz!
Pude ser feliz
Y estoy en vida muriendo
Y entre lágrimas viviendo
Los pasajes más horrendos
De este drama sin final
¡Sombras, nada más
Entre tu vida y mi vida
Sombras, nada más
Entre mi amor y tu amor!
Qué breve fue tu presencia en mi hastío
Qué tibias fueron tu mano y tu voz
Como luciérnaga llegó
Tu luz y disipó
Las sombras de mi rincón
Y me quedé como un duende, temblando
Sin el azul de tus ojos de mar
Que se han cerrado para mí
Sin ver que estoy así