Dentro de mi alma oigo el grito
De un corazón anhelante
Que repite a cada instante
Su deseo de querer
Y en mis noches de delirio
Siento correr por mis venas
Un deseo que me quema
Y que me obliga a gritar
Hambre de sentir el fuego ardiente
De un amor que sea inclemente
Que me queme las entrañas
Hambre de besar con ansia loca
Que me muerdan en la boca
Hasta hacérmela sangrar
Sí hambre de un amor que me calcine
Que besos asesine mi deseo y mi ansiedad
Hambre de un amor desesperado
Que me lleve hasta el pecado
Aunque tenga que llorar
Si hambre de sentir el fuego ardiente
De un amor que sea inclemente
Que me queme las entrañas
Ay hambre de besar con ansia loca
Y que me muerdan en la boca
Hasta hacérmela sangrar
Yo tengo hambre de un amor que me calcine
Y que con besos asesine mi deseo y mi ansiedad
Hambre, hambre de un amor desesperado
Que me lleve hasta el pecado
Aunque tenga que llorar
Aunque yo tenga que llorar
Aunque tenga que llorar
Aunque tenga que llorar.