Nena, tan linda como una sirena Con la cola llena de arena y perfumada por la sal Diosa, de pelo negro y piel morena Radiente perla marinera, como la venus frente al mar Milagro de la creación
Era como admirar a una nereida Que con su mano te despeina y el viento la vuelve a peinar Fuerte, como el susurro de tu boca Que cuando mira me provoca y no se sabe que pensar
Era como adimirar a una nereida Que con su mano te despeina y el viento la vuelve a peinar Dueña, de una sonrisa que marea cuando sus pechos vanvolean Como tormenta tropical, un atentado a la moral